Clasificación católica: ‘A-2’ | Clasificación de la industria: ‘PG-13’
La expectativa por el nuevo capítulo de Star Wars, titulado The Force Awakens, era grande, muy grande. Las seis primeras entregas de la popular serie había aparecido en los cines del mundo a partir de 1977, fecha del estreno de Star Wars y el postrer episodio en estrenarse databa del 2005. Los años transcurridos desde esa fecha habían aumentado la nostalgia de los que crecieron viendo tales cintas y la existencia de una nueva generación que no las conocía pero que había oído hablar de las mismas auguraba un público crecido para una continuación de la serie.
El resultado ha sido como se esperaba pues este séptimo episodio se ha convertido a nivel mundial, en el filme más exitoso de todos los tiempos superando a Avatar y Titanic, dos fuertes competidores por ese mismo reconocimiento.
La nueva película no decepcionará a los antiguos seguidores de los episodios anteriores y satisfacerá las exigencias de acción continua y abundante uso de efectos especiales de los nuevos asistentes al cine.
The Force Awakens presenta una vez más al trío de personajes que hicieron célebres a las Guerras Estelares. Reaparecen Han Solo (interpretado de nuevo por Harrison Ford), la princesa Leia convertida en generala (su papel una vez más lo asume Carrie Fisher) y Luke (cuya caracterización corre a cargo de Mark Hamill).
George Lucas, el creador de la serie, ha sido reemplazado como director del nuevo proyecto por J.J. Abrams y la nueva película se convierte en una sucesión de secuencias que recuerdan –agrandadas- los episodios de Flash Gordon de los años treinta y cuarenta, modestos esfuerzos de un cine que con los años –estaba destinado a convertirse en el máximo proveedor de películas de ciencia-ficción del mundo entero.
Esa sucesión de secuencias de peligros asombrosos, escenarios variados y continuo barraje de efectos especiales domina el nuevo filme.
Su trama sigue en líneas muy parecidas la de las cintas anteriores. La generala Leia encabeza ahora las fuerzas de la resistencia perseguidas por los nuevos detentadores del poder en la galaxia lejana y, en su auxilio, vienen Han Solo y un nuevo trío de personajes: Finn, (interpretado por el actor afro-americano John Boyega), Poe (por el actor Oscar Isaac) y Rey, una mujer audaz cual ninguna, (interpretada por Daisy Ridley), cuya afiliación con el lado brillante de la galaxia, la hará sobrevivir peligros inimaginables.
La trama gira en torno a la búsqueda de un mapa inter-galáctico que permitirá descubrir el paradero de Luke Skywalker y, por supuesto, siendo ésta la primera de una trilogía de nuevas películas, cabe ya presumir cuál será la nueva filiación que se descubrirá en la nueva serie en progreso.
Un filme de grandes logros técnicos puestos al servicio de una trama no por conocida menos impactante, actuada por un trío muy convincente de nuevos intérpretes a los que se suman en un homenaje a la nostalgia, los tres actores que se hicieron famosos por su aparición en las películas iniciales de la serie.
La cinta ha sido clasificada ‘A-2’ para jóvenes y mayores por la clasificación católica y ‘PG-13’, por la voluntaria de la industria.