“A mi modo de ver las cosas son nombramientos indignos y sacrílegos”, así describió el Lcdo. Carlos Ramos, de la Facultad de Derecho de la Universidad Interamericana de Puerto Rico, la falta de transparencia al momento de seleccionar a los candidatos que serán nombrados jueces. “La transparencia no se logra repitiendo que somos transparentes como si con la mención de la palabra surgiera la claridad. La transparencia no puede ser una palabra hueca. Los nombramientos hechos por la autoridad nominadora, efectivamente corresponden, aunque no siempre, a un selecto grupo de abogados y abogadas que tienen acceso al poder político de turno y que responden a la ideología política del mismo partido”, manifestó.
Aclaró, que a pesar de que estas prácticas ocurren frecuentemente, “existen muchos jueces y juezas que sus nombramientos a pesar de este proceso son excepcionales”.
Del mismo modo, criticó que desde el 2010 se eliminó el requisito que existía para que el Colegio de Abogados evaluara los candidatos a ser jueces. “Con la eliminación de ese requisito la opacidad en este proceso es total. Es decir, hay una alarmante falta de transparencia en el proceso de selección de los nominados”, reiteró.
A su vez el abogado con 40 años de experiencia, sostuvo que la falta de transparencia en los nombramientos de jueces también ocurre en el Tribunal Supremo. “Se ha dado el caso que se han designado jueces un viernes y se han confirmado un lunes con muy poca oportunidad de escrutinio público, peor aún se han confirmado jueces a través de descargue, sin celebración de vistas públicas”, precisó.
Las expresiones del Lcdo. Ramos surgieron como parte del Simposio sobre Transparencia y designación de los jueces, en la continuación del Tercer Encuentro Nacional sobre Transparencia e integridad en la gestión pública, que se efectuó el jueves, 3 de mayo en la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico, Recinto de Ponce. En la actividad, también participó la exdirectora de la Oficina de Administración de Tribunales (OAT), Sonia I. Vélez y el actual juez presidente del Tribunal Federal, Hon. Gustavo Gelpi.
Sobre cómo debe ser la selección de los candidatos a ser nombrados jueces, la Lcda. Sonia I. Vélez, detalló que a pesar de que la Constitución de Puerto Rico en su artículo V, sienta las bases para el establecimiento del Poder Judicial y detalla en la Secc. 8, que los Jueces serán nombrados por el Gobernador, con el consentimiento del Senado, no establece qué cualidades deben tener los nominados.
Explicó que es la Ley de la Judicatura la que contiene el nuevo Reglamento para la evaluación de jueces y juezas del Tribunal de Primera Instancia que incluye entre los criterios a considerarse: integridad, reputación o imagen pública, reputación intelectual, destrezas profesionales, capacidad de análisis, laboriosidad, capacidad administrativa, temperamento, competencia académica, capacidad de rendimiento y atención de casos asignados, experiencia, vocación al servicio público e interés en proseguir la carrera judicial, entre otros.
La exjueza, indicó que la Ley antes mencionada, crea la Oficina de Nombramientos Judiciales adscrita a la Oficina del Gobernador que son los encargados de asesorar al Gobernador en la selección de profesionales para ocupar los cargos de Jueces del Tribunal de Primera Instancia y del Tribunal de Apelaciones.
Mencionó que una vez el Gobernador hace la designación llega a la Comisión de Nombramientos del Senado para ser evaluado. Como dato curioso, la Lcda. Veléz informó que este año el senador Thomas Rivera Schatz, preside tanto la Cámara Alta como esta Comisión, lo que, en un turno posterior, el Lcdo. Ramos criticó severamente.
Relacionado a por cuánto tiempo los jueces pueden ocupar sus cargos, señaló que el juez municipal estará por un término de 12 años, mientras el juez superior y el de apelaciones estarán por 16 años, respectivamente. La exdirectora de la OAT comunicó que “los jueces pueden ser renominados o ascendidos por el Gobernador, pasando nuevamente por los procesos de evaluación establecidos”.
Por otra parte, confirmó que al momento hay 16 vacantes para juez Superior, 5 vacantes para juez Municipal, 2 para el Tribunal de Apelaciones y ninguna para el Tribunal Supremo.
Por su parte, el juez presidente del Tribunal Federal, Hon. Gustavo Gelpi que lleva solo dos semanas en el cargo, afirmó que llegó por seniority y por su edad, porque el presidente no puede ser mayor de 65 años. Esta posición es por un término de 7 años, aunque su designación como juez es vitalicia.
El juez presidente, aceptó que, en su caso fue el excomisionado residente, Luis Fortuño quien lo recomendó ante el Presidente de EE.UU. El expresidente, George W. Bush fue quien lo nominó en el 2006. Recordó que antes fungió como juez magistrado en el Tribunal Federal.
Señaló que es costumbre en Puerto Rico que al final de un cuatrienio, se nombren como jueces, a abogados que nunca litigaron en el Tribunal. “Aquí antes de que cambie la administración nombran a alguien, lo confirman y luego lo mandan a una sala de Familia o Penal y nunca había estado en una. Es el issue de temperamento judicial vs experiencia, lo ideal es que haya un mix”, reconoció.
Comentó que dada la naturaleza de su trabajo no está autorizado a participar en actividades políticas. Anticipó que se espera que próximamente se nombre un nuevo juez federal porque el cumulo de trabajo es inmenso.