Este 13 marzo se cumplen 5 años desde que el entonces Cardenal argentino Jorge Mario Bergoglio, fue elegido como el Papa número 266 con 77 años de edad. Francisco, no solo es el primero en elegir ese nombre, también es el primer latinoamericano y jesuita en dirigir la Iglesia Católica. A continuación, presentamos algunos de los eventos más significativos del Santo Padre durante su pontificado.
Lo primero que hizo el Sucesor de Pedro tras su elección en 2013, fue mantener una vestimenta sencilla y alojarse en la residencia Santa Marta, una dependencia del Vaticano, junto con Obispos y sacerdotes.
A mediados de año, dio a conocer su Primera Encíclica titulada: Lumen Fidei (La luz de la fe), originalmente iniciada por el hoy Papa Emérito Benedicto XVI. Tuvo su primer viaje a América cuando visitó Río de Janeiro (Brasil) para la celebración de la Jornada Mundial de la Juventud. Para el mes de noviembre, dio a conocer la Exhortación Apostólica Evangelii Gaudium (La alegría del Evangelio).
A principios del segundo año, realizó la canonización conjunta de Juan Pablo II y Juan XXIII efectuada en el mes de abril en la Plaza de San Pedro. En mayo visitó Tierra Santa donde abrazó al rabino Abraham Skorka y al musulmán Omar Abboud ante el Muro de los Lamentos, gesto que se denominó “el abrazo de las tres religiones”.
Realizó la primera parte del Sínodo de los Obispos por la familia que se efectuó en Roma del 15 al 19 de octubre. En Turquía, se reunió con el Patriarca Ecuménico de Constantinopla, su Santidad Bartolomé I, y firmaron una declaración para el restablecimiento de la plena comunión entre católicos y ortodoxos.
En las postrimerías del 2014, Estados Unidos y Cuba alcanzaron un acuerdo para restablecer sus relaciones diplomáticas. De inmediato se informó que el Papa tuvo mucho que ver con el acuerdo logrado entre ambos países, tras sostener en varias ocasiones conversación con ambos presidentes.
Para su tercer año como Pontífice, en enero del 2015, viajó a Sri Lanka y Filipinas, donde presidió la Santa Misa en Manila ante más de 6 millones de personas, quedando registrado como el evento más multitudinario alguna vez presidido por un Pontífice. Se continuó con la segunda parte del Sínodo de la Familia del 4 al 25 de octubre.
Asimismo, publicó la Bula Misericordiae Vultus (El rostro de la Misericordia) con la que convocó el Jubileo Extraordinario de la Misericordia que comenzó el 8 de diciembre de 2015 y concluyó en la solemnidad litúrgica de Jesucristo Rey del Universo el 20 de noviembre de 2016 cerrando la Puerta Santa. Al igual, que su segunda Encíclica titulada Laudato Si’, (Alabado Sea) en la que se discute ampliamente el tema ambiental.
Además, realizó cinco viajes apostólicos internacionales, para un total de 12 desde su elección. De camino a México, tuvo un encuentro histórico en Cuba con el Patriarca ortodoxo ruso Kirill.
Para el 19 de marzo de 2016 redactó la Exhortación Apostólica Amoris Laetitia (La alegría del amor) en la que recoge los resultados de los Sínodos sobre la familia convocados en 2014 y 2015. Con motivo de la conclusión del Jubileo Extraordinario de la Misericordia publicó con fecha del 20 de noviembre su Carta Apostólica Misericordia et misera.
En julio asistió a la XXXI Jornada Mundial de la Juventud en Cracovia, Polonia. Canonizó a Madre Teresa de Calcuta el 4 de septiembre de ese año. Su gira terminó en Suecia con motivo de los 500 años de la reforma luterana y los 50 años de las relaciones entre esta confesión y la Iglesia Católica.
Ya en el quinto año de papado, visitó el Santuario de Nuestra Señora de Fátima en mayo con motivo del centenario de las apariciones de la Virgen María en Cova da Iria, Portugal. Allí también canonizó a los pastorcitos de Fátima, Jacinta y Francisco. Su agenda del 2018 comenzó con el viaje a Chile y Perú, siendo el noveno y décimo país visitado de este continente muy querido por él.