El pasado viernes, 16 de abril, a las 10:00 a.m., un grupo de alrededor de 80 personas entre los que se encontraban sacerdotes, diáconos, catequistas y líderes parroquiales, participaron de un taller sobre ideología de género en la casa de retiros Camino de la Cruz en Humacao.
Con ellos también estuvo el Obispo de la Diócesis de Fajardo-Humacao, S.E.R. Mons. Luis F. Miranda Rivera, O. Carm., quien les convocó al evento consciente del deber que tiene la Iglesia frente al desarrollo de proyectos legislativos en Puerto Rico que atentan contra la dignidad humana y la familia.
El taller estuvo dirigido por dos peritos en el tema: el P. Carlos Pérez Toro, Doctor en Teología, Licenciado en Derecho Civil y Canónico, y el Juez Jorge Lucas Escribano Medina, quien también es Pastor de la Iglesia Cruzada Evangélica Misionera de San Juan.
Ambos ponentes desarrollaron el tema de la ideología de género, resaltando, especialmente, lo que propone el Proyecto de Ley del Senado 184, el cual amenaza la libertad religiosa, el derecho fundamental de los padres a educar a los hijos conforme a sus principios y valores, y las licencias de profesionales en el área de la salud y la educación.
“Para ellos (los que proponen y respaldan el proyecto), el sexo es un dato a superar; para nosotros, los creyentes, es un don que recibimos y un proyecto a realizar”, expresó el P. Carlos Pérez, quien señaló, además, que el PS 184 “quiere proponer un nuevo paradigma social en el cual ningún estamento, sea religioso, profesional o los padres de familia, pueden negarse a asumir ese paradigma”.
Por su parte, el Juez Escribano explicó que la llamada perspectiva de género “son tres cosas a saber: es una ideología porque no tiene base científica, no es una de las escuelas de conducta de la psicología, sino que sencillamente es un concepto. Se está usando como herramienta educativa a través del Departamento de Educación para afectar a los niños en su desarrollo […], y es un movimiento político bajo la bandera del arcoiris para establecer un gobierno con esa visión”.
Tanto el juez como el presbítero dieron ejemplos, basados en hechos, para demostrar las consecuencias de la implementación de la ideología de género, los modos en que atenta contra la dignidad humana, y los daños profundos y, en muchos casos irreparables, que causa, sobre todo, en la niñez y la juventud.
En ese último aspecto, el Juez Escribano propuso para la reflexión: “Si a una niña de 14 ó 15 años, a espalda de sus padres, le meten bloqueadores hormonales y le mutilan el cuerpo, cuando tenga 28 y quiera regresar a lo que antes tenía, ¿quién le devuelve lo que le quitaron?”. Y es que, según el jurista, hay estudios que demuestran que “las operaciones no los transforman, sus depresiones son más profundas, aumenta el número de suicidios”, pues cualquier esfuerzo humano para cambiar el sexo, nunca cambiará la naturaleza.
Hablaron, además, de la importancia de escuchar atentamente las inquietudes legítimas de todos los sectores involucrados en este proceso, de educarse acerca del tema, así como del deber de los creyentes de aportar al bienestar social desde la perspectiva religiosa.
Luego de las intervenciones de cada uno, hubo un espacio para atender preguntas e inquietudes de los participantes acerca del tema.
Vanessa Rolón Nieves
Para El Visitante