Como una bendición, única e inolvidable esas fueron las palabras que utilizaron los dos jóvenes que representaron a Puerto Rico en el Undécimo Foro Internacional que se celebró en Roma del 18 al 22 de junio.
Ramón Torres Maldonado y Natalia García, ambos de 24 años y coordinadores diocesanos de la Pastoral Juvenil de Arecibo y Caguas, respectivamente, fueron los jóvenes escogidos para representar a la Conferencia Episcopal Puertorriqueña en el Foro Post Sinodal junto a jóvenes católicos de los cinco continentes.
Ramón señaló que el propósito del PostSínodo era trabajar con la Exhortación Apostólica Christus vivit que redactó el Papa. “La meta era evaluar, ver qué acciones se podían tomar para implementar en cada país, que los jóvenes conocieran la Christus vivit. Lo que el Papa nos propone y a los que nos exhorta. Si eso se logra, podremos alcanzar una Pastoral Juvenil más en conjunto, más solidaria y más cercana a los jóvenes marginados y alejados”, señaló.
Por su parte, Natalia indicó que: “Ver jóvenes de los cinco continentes del mundo y que Puerto Rico estuviera presente. Nosotros que somos una Isla que muchas veces la gente ni la ve, pero en el Foro tuvimos una voz a nivel internacional. Fue un privilegio total. En el rostro de cada uno de los jóvenes se podía ver a Cristo vivo. Todos estábamos allí por un mismo fin Jesús, pero con realidades diferentes que tenemos que trabajar”.
De otro lado, Ramón destacó que como parte del taller debían dividirse en grupos por idioma, para internalizar los temas presentados. “Junto a nuestros hermanos de Latinoamérica reflexionamos sobre las actitudes que debemos tener en torno a la Exhortación Apostólica, si se está dando a conocer verdaderamente y si los jóvenes la conocían”, explicó.
Añadió que: “El Foro nos recordó que la exhortación no se puede quedar como un libro de archivo y quedarse ahí, sino que salga a través de las redes sociales, de video. En fin, que el joven se fascine por esa exhortación apostólica”. A su vez recordó que el mismo documento plantea la importancia de los adultos y el acompañamiento a los jóvenes.
Mientras, Natalia destacó que “existen muchas similitudes entre Puerto Rico y los países de América Latina. Conversamos y nos dimos cuenta que tenemos una realidad común dentro de la Pastoral Juvenil. Un camino común, que llevamos trabajando desde hace tiempo con el libro Civilización del Amor, proyecto y misión. Esta Exhortación Apostólica lo que hace es reafirmar el trabajo que nosotros llevamos haciendo hace años”.
De otra parte, Ramón precisó que entre los temas discutidos estuvo la necesidad de abrir espacios de acogida para los jóvenes universitarios porque una vez salen de los grupos juveniles se quedan literalmente en el aire. Asimismo, se mencionó la importancia de la sucesión de líderes. “No se quieren líderes fijos, sino que se dé la oportunidad de que haya relevo para que otros se puedan nutrir de esa experiencia”, enfatizó.
Natalia admitió que del Foro se llevó dos palabras: acompañamiento e integración. “El acompañamiento de guías adultos, de los Obispos y sacerdotes que van mano a mano con los jóvenes. Integración con la gente que no asiste a la Iglesia, con los jóvenes que no comparten nuestra misma fe, y con todas las demás áreas pastorales, porque no podemos trabajar solos”.
Cabe destacar, que como parte del Foro tuvieron una audiencia privada con el Papa y ambos pudieron estrechar la mano del Santo Padre, y conversar brevemente con él. Acción que ninguno de ellos olvidará por el resto de sus vidas. ■
Camille Rodríguez Báez
Twitter: @CamilleRodz_EV
c.rodriguez@elvisitantepr.com