Luego del paso del huracán María por nuestra Isla, ha sido frecuente escuchar personas expresando preocupación, miedo, culpa y/o coraje: “No sé qué voy a hacer, ya mismo comienza la temporada de huracanes otra vez y me da miedo’’, “a veces siento como si volviera a vivir esa experiencia’’, “ya no me gusta salir tarde por miedo a que se vaya a ir la luz’’, “me da mucho miedo cuando comienza a llover’’ y “fue mi culpa por qué no tomé precauciones’’… Estas son algunas de las expresiones más frecuentes de mis pacientes, acompañadas de llanto, cambios en el estado de ánimo, fatiga, angustia y desesperación.
En el Instituto Especial para el Desarrollo Integral del Individuo, la Familia y la Comunidad (IDIIFCO) en Guánica, continuamos con nuestro compromiso de apoyar las necesidades de salud mental de los participantes y de diferentes comunidades en Puerto Rico. Es una realidad que aún a 6 meses del paso del huracán por nuestra Isla, existen miles de personas lidiando con las secuelas de este evento, que para muchos resultó traumático y experimentando dificultad para entender lo que sienten.
Los síntomas de trauma se refieren a dificultades físicas, conductuales o emocionales que están directamente relacionadas con la experiencia traumática. Típicamente corresponde a síntomas del Trastorno de estrés post-traumático, pero también abarcan síntomas depresivos, de ansiedad o de comportamiento, incluyendo automutilación, abuso de sustancias, dificultades para relacionarse con otros y para controlar las emociones. A continuación les presentamos una breve explicación:
¿Qué es el Trastorno de estrés post-traumático (TEPT)?
El TEPT es una condición psicológica común que puede ocurrir a personas que han estado expuestos de manera física, auditiva y/o visual, a un evento traumático, como un desastre natural, un accidente grave, un acto terrorista, guerra, violación o abuso físico, entre otros.
¿Cómo se desarrolla?
Luego de la exposición directa o indirecta de un evento traumático las personas comienzan a desarrollar síntomas. El TEPT se puede diagnosticar luego de un mes de la exposición al evento y de estar presentando los síntomas. Es importante señalar que no todas las personas que están expuestos a un evento traumático desarrollan el trastorno. Por tanto, no todas las personas que estuvieron expuestos al huracán María van a desarrollarlo, ya que depende en gran medida de diferentes factores relacionados con el evento, como por ejemplo: la proximidad con el evento, la intensidad y/o duración, como reaccionó al evento, si resultó herido o perdió a alguien importante, el grado de control que usted sintió ante el evento, y el apoyo recibido.
¿Cómo saber si usted o alguien cercano están presentando síntomas asociados al Trastorno de estrés post-traumático?
Algunos indicadores pueden ser:
1. Incapacidad persistente de experimentar emociones positivas.
2. Experimentar estados emocionales negativos como: miedo, culpa, tristeza, confusión.
3. Comportamiento irritable y expresiones de coraje.
4. Evitar conversaciones relacionadas al huracán.
5. Problemas con la concentración y atención.
6. Problemas para conciliar el sueño y sueños angustiosos acerca del huracán.
7. Recuerdos angustiosos recurrentes, involuntarios e intrusivos en los que se incluyen imágenes, pensamientos o percepciones acerca del huracán.
8. Actúa o tiene la sensación de que el huracán está ocurriendo al momento.
9. Está demasiado atento a lo que ocurre a su alrededor (hipervigilante).
Busque ayuda de un profesional de la salud mental si cree tener seis ó más de estos indicadores. Especialmente si le causan malestar significativo y/o están afectando su capacidad para cumplir con sus labores o tareas del día a día. En IDIIFCO contamos con personal especializado y utilizamos diferentes modalidades de tratamiento de forma gratuita para tratar diferentes tipos de trauma. No espere más, comuníquese con nosotros al: 787–569-7285, 787-821-0546 ó 787-458-0401.
Dra. Yahaira M. Patín Betancourt
Psicóloga Clínica– Especialista en Trauma