Es posible que más de una vez escuchara que “donar sangre es donar vida”, esto como parte de las campañas de los bancos de sangre en Puerto Rico. A pesar de los esfuerzos para concientizar a la ciudadanía, cada año entidades como el Banco de Sangre de Puerto Rico Centro Médico, que brinda servicio a seis hospitales de la institución médica enfrenta nuevos retos para mantener sus abastos.
El primer golpe al inventario, que desde ya se encontraba por debajo de lo establecido, fue en marzo de 2016 cuando Puerto Rico se enfrentó a la epidemia del Zika y la FDA (Food and Drug Administration) dio el mandato de cierre a todos los bancos de sangre.
“Fue bien difícil, porque de tener un donante educado que viene todo el tiempo y que reconoce la importancia de donar, de momento deja de venir”, describió Ada Justiniano, gerente del Banco de Sangre de Puerto Rico de Centro Médico. Según comentó la desinformación tuvo un rol crítico ya que el pensar de muchos fue que al donar les daría Zika cuando el contagio ocurre a raíz de la picadura del mosquito que es el portador.
Un año después, el 20 de septiembre de 2017, el huracán María hizo su entrada por la isla causando estragos. A cuatro meses de su paso, la meta de la institución es que diariamente lleguen 60 donantes para colectar sangre y 12 para colectar plaquetas, sin embargo, la realidad es otra. “Desde Irma estamos arrastrando esta situación porque los donantes no llegan. Tan pronto llegó María el caos fue más, debido a que hubo un cierre del aeropuerto y no dejaban entrar ni salir aviones comerciales a menos de que fueran viajes humanitarios, a través de la Guardia Nacional o empresas sin fines de lucro”, explicó Justiniano mientras enfatizó que las pruebas de sangre no se realizan en Puerto Rico por lo que se refieren a Estados Unidos.
Continuó diciendo que: “Los bancos de sangre estuvimos cerrados por 15 días donde se consumió el inventario que se tenía y nos quedamos en cero, especialmente en las plaquetas que duran 5 días”. Razón por la que hubo que comprar a bancos externos a precios altos para garantizar que durante la emergencia ningún paciente se quedara sin el servicio de sangre. Además de la falta de donantes, las sangrías programadas durante los últimos meses del 2017 fueron canceladas ya fuera por falta de agua, luz, averías o porque el edificio dejó de existir.
Subrayó que las épocas de Navidad y verano son las más críticas por ser los meses preferidos para vacacionar, al tiempo que ocurren muchos accidentes y son pocos los donantes. Actualmente, los abastos siguen muy bajos, la sala continúa vacía y a pesar de los múltiples esfuerzos de reclutamiento no hay respuesta por parte de la ciudadanía. El inventario que necesita el servicio de transfusión, que es a donde llegan las órdenes de los hospitales, es mínimo de 200 unidades diarias en sangre, mientras que en plasma necesitan de 200 a 250 unidades. Sin contar los pacientes de oncología y de la unidad de trasplante de médula.
Aunque enero se distingue por ser el mes de la donación de sangre, se puede donar vida todo el año. Justiniano admitió que el grupo más importante es O- y O+ porque la mayoría de la población es O y que el donante universal de plasma es AB. Pero en estos momentos urgen de todos los grupos y de todos los Rh. “La donación de sangre es el acto más generoso que pueden realizar, una sola donación salva hasta cuatro vidas. Es sumamente importante para cumplir con el tratamiento de pacientes que requieren trasfusiones continuas”, precisó.
Al momento de este reportaje, la sala de espera se encontraba vacía y en el interior solo se encontraba Héctor M. Sánchez con quien El Visitante tuvo oportunidad de conversar. Según dijo, además de tener una condición por la que la hemoglobina le sube comentó que: “Cada vez que me toca vengo a donar porque me ayudo yo y ayudo a los demás. Lo importante siempre es ayudar a los demás y uno nunca sabe si en algún momento uno o un familiar necesite ayuda”.
Entre los requisitos con los que necesita cumplir están: tener una hemoglobina de 12.5 o más en mujeres y 13 o más en varones. Sentirse bien de salud y no tener síntomas de catarro. Llevar identificación con foto. Pesar un mínimo de 110 libras para donar sangre y 130 lbs. para plaquetas. Si realizó viajes al extranjero en el último año debe indicar a dónde fue. Si está tomando medicamentos debe indicarlo. De tener tatuajes y body piercing deberá esperar 1 año luego de realizado para donar. El tiempo de espera una vez realice su donación es de 56 días para sangre, para plaquetas cada 7 días y para plasma cada 24 días.
El Banco de Sangre de P. R. Centro Médico opera los siete días de la semana en los horarios de 8:00 a. m. a 5:00 p.m. para donaciones de sangre. Los interesados en donar plaquetas deberán comunicarse al 787-777-3844 para obtener cita en un horario de 8:00 a. m. a 2:00 p. m. Pueden llamar para obtener más información o para coordinar sangrías.