Hace 2 semanas el Colegio Americano de Cardiología (ACC, por sus siglas en inglés) y la Asociación Americana del Corazón (AHA, por sus siglas en inglés), dieron a conocer las nuevas guías del Comité Nacional Conjunto para la Prevención, la Detección, la Evaluación y el Tratamiento de la Hipertensión Arterial. Estas establecen que una presión arterial menor de 120/80 mm Hg, es una presión arterial normal.
Según el cardiólogo, Dr. Iván Lladó estas guías de prácticas clínicas proveen recomendaciones para los pacientes hipertensos que están en riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares. El galeno aclaró que “las guías no son mandatorias son solo recomendaciones porque cada paciente tiene sus particularidades y que nunca sustituyen el juicio clínico de un médico con su paciente”.
Destacó que estas guías se revisan cada 2 o 3 años a la luz de nuevas investigaciones, descubrimientos científicos, la más reciente tecnología médica y tratamientos médicos, etc. Asimismo, confirmó que para alcanzar estos acuerdos se reúne un equipo multidisciplinario en diferentes áreas de la salud para hacer las recomendaciones a través de la evidencia obtenida.
El Cardiólogo enfatizó que las nuevas guías establecen que ahora una presión que se mide en milímentros de mercurio (mm) es considerada como alta cuando está en 130/80 mm Hg, en lugar de 140/90 como era antes. “Hace 3 años se decía que una persona de más de 60 años podía tener una presión menor de 150/90 mm Hg y era aceptable por su edad. Mientras, que si la persona tenía 59 años o menos se recomendaba que la presión fuera menor de 140/90 mm Hg. Claro está era para aquellas personas que no tuviesen factores de riesgo como diabetes, problemas renales y otros, pero eso ahora cambió”, dijo Lladó.
El Comité Nacional Conjunto para la Prevención, la Detección, la Evaluación y el Tratamiento de la Hipertensión Arterial determinó que si la presión sistólica (número superior) está entre 120-129 y la diastólica menor de 80 se cataloga como una presión elevada.
Si la sistólica está entre 130-139 y la diastólica entre 80-89 se dice que es Grado 1. Mientras, si esta en 140/90 mm Hg, ya es Grado 2. En casos donde el número superior excede 180 o más y el inferior es mayor a 120 hay una crisis hipertensiva que requerirá que el paciente haga cambios drásticos en su estilo de vida, la ingesta de medicinas y probablemente sea hospitalizado hasta estabilizarlo.
El Dr. Lladó confesó que estas nuevas categorías de presión arterial le permiten a ellos como profesionales ofrecerle un mejor tratamiento a sus pacientes y de esta forma evitar daños a los órganos importantes como lo son el cerebro, corazón y riñón que se afectan cuando aumenta la presión arterial.
Ante esto el Médico sugirió a aquellos que tienen historial familiar de enfermedades cardiacas, diabetes o renales, que vayan más temprano a ver a su doctor. Incluso aconsejó a los padres que debido a la proliferación de obesidad y diabetes en los niños, por no comer saludable y el sedentarismo, le pidan al pediatra que monitoree sus niveles de azúcar y colesterol en los más pequeños.
Igualmente, sugirió a los pacientes que tienen historial familiar de problemas de presión arterial, que cuiden su salud. “Tienen que mejorar su peso porque la obesidad es un problema, tiene que hacer ejercicio, si fuma tiene que dejarlo, si tiene colesterol alto tiene que controlarlo, si tiene diabetes tiene que comer sano”, admitió. Insistió que “bajar la presión arterial dependerá del paciente porque el médico le dice lo que tiene que hacer pero es él o ella, una vez sale de la consulta, quien tiene la opción o no de seguirlas. Si las sigue puede evitar otras complicaciones”, urgió.
Del mismo modo, recordó que a medida que la persona alcanza más edad su presión arterial aumenta porque los vasos sanguíneos se endurecen y en algunos casos hasta se calcifican. “Esto se acelera si la persona come mucho sodio, no hace ejercicios, toma mucho alcohol, no come frutas y vegetales”, detalló. Además de los cambios en el estilo de vida hay que manejar el estrés que es otra de las causas por las que se descontrola la presión.
De otra parte, el Doctor indicó que luego del paso del huracán María recibió en su oficina muchos pacientes con la presión arterial elevada “por estar comiendo jamonilla, salchichas, espagueti de lata y corned beef”. Por eso, reiteró la importancia de comer saludable, hacer ejercicios y dejar el alcohol y el cigarrillo. “De no hacerlo le puede dar una crisis hipertensiva, donde todo se descontrola. Entonces empieza con dolor de cabeza, agua en los pulmones, que es fallo cardíaco, le puede dar un infarto, o problemas en la aorta y entonces tiene que ser hospitalizado. Si no seguimos las recomendaciones y no nos cuidamos vamos a terminar en intensivo y con riesgo de muerte”, advirtió.
Por último, con la llegada de las fiestas navideñas que es sinónimo de alimentos de alto contenido calórico enfatizó la moderación, para disfrutar las fiestas sin afectar la salud. “Del pernil coma la carne más blanca y con menos grasa, nada de cuerito, ni morcillas. El pastel preferiblemente el de pollo, si es muy grande solo la mitad. No debería comer postres, pero si no puede evitarlo ingiera solo uno, escoja el que menos azúcar tenga y no se exceda con el alcohol”, finalizó.