La lectura del libro de la Sabiduría es una reflexión sobre la noche del Éxodo, cuando el pueblo de Israel fue liberado de la esclavitud de Egipto. En su fe, el pueblo estaba esperando la liberación por parte de Dios y estaba listo para ella.
El misterioso autor de la Carta a los Hebreos nos enumera distintos aspectos de lo que es la fe verdadera.
El Evangelio de San Lucas nos presenta la reflexión que Jesucristo hace de la fe verdadera, la que describe como una actitud de espera en la Providencia de Dios y actuar acorde a ella.
Este domingo es uno de los pocos del Tiempo Ordinario en las tres lecturas hablan sobre un mismo tema: el tema de la fe o, mejor dicho, la actitud del que tiene fe verdadera. Para comenzar, la verdadera fe no es un sentimentalismo, no es un pensamiento, no es una idea, ni un mero subjetivismo. La verdadera fe es toda una acción, una convicción, una actitud de espera a la acción de Dios en nuestras vidas, con la seguridad de que Dios va a actuar de manera poderosa en ellas.
El libro de la Sabiduría- uno de los 7 libros no reconocidos por la biblia protestante- nos habla de la actitud del pueblo de Israel ante el paso del ángel exterminador por los hogares de los egipcios para matar a los primogénitos. Su fe les decía que tenían que estar preparados para lanzarse hacia la libertad una vez que Dios diera la señal a través de su siervo Moisés.
El Autor de la Carta a los Hebreos nos presenta como ejemplo de fe la actitud de Abraham y su familia. Ellos escucharon a Dios decirle que lo siguieran y ellos lo hicieron, enfrentando toda clase de peligros y confiando que Dios nunca los abandonaría.
Por último, Jesús nos dice que la fe nos hace estar preparados para lo que Dios pida de nosotros. Nuestra fe nos dice que, cuando Jesucristo se cruza en nuestro camino, nos lanza la palabra “Sígueme”, para que nosotros lo dejemos todo y lo sigamos. Esto hace que estemos siempre en vela, a la espera de lo que el Señor pida de nosotros, para seguirlo. Esa misma fe nos dice que, en nuestro seguimiento a Jesucristo, Él nos cuidará y guiará nuestros pasos. Cuando nos exhorta a que lo vendamos todo, lo que nos dice que confiemos totalmente en Él. Cuando nos dice que estemos en vela quiere decir que en cualquier momento nos va a llamar y debemos estar preparados para seguirlo. ¿Qué clase de llamado? Puede ser un llamado a una vocación religiosa, a una misión en concreto, a ayudar a un necesitado o incluso llamarnos a la vida eterna cuando llegue el momento de encontrarnos con Dios de manera definitiva. Nuestra fe nos dice también que Dios nunca nos va a pedir algo que nos perjudique, sino que nos va a dar la verdadera felicidad que consiste en amar a Dios, tener fe en Él y seguirlo a donde Él nos diga que lo sigamos.
P. Rafael Méndez Hernández (P.Felo)
Para el Visitante