“Entre las obras excelentísimas del servicio de Dios, la más excelente es ayudar a la salvación de las almas, por las cuales tanto padeció nuestro Redentor”. Estas palabras de San José de Calasanz, Fundador de las Escuelas Pías, encuentran realización en corazones como el de P. Jorge L. Ramírez Quiles, Sch.P., quien recibió el Sacramento del Orden en el grado de los presbíteros el pasado 11 de junio de 2022, en la Parroquia San Joaquín y Santa Ana de Adjuntas, por imposición de manos y oración consecratoria de Mons. Féliz Lázaro, Sch.P., Obispo Emérito de la Diócesis de Ponce.
P. Jorge tiene 28 años de edad, es natural de Bayamón y es el menor de los tres hijos; fruto del amor esponsal entre Jorge L. Ramírez y Wanda I. Quiles.
Su deseo de servir a los pobres y trabajar por la educación y evangelización de los niños y jóvenes, al tiempo que sentía una llamada particular al sacerdocio, encontró lugar en la Orden de los Clérigos Regulares Pobres de la Madre de Dios de las Escuelas Pías, mejor conocidos como Escolapios, en la que ingresó cuando tenía 17 años.
Familiares y amigos de diferentes partes de la Isla, así como de la Parroquia La Anunciación de Nueva York donde el neo presbítero pasó los últimos dos años, se dieron cita para acompañarlo el su ordenación. Igualmente sacerdotes, diáconos y religiosos de distintas diócesis.
Desde la procesión de entrada y todo el rito el rostro del P. Jorge se vio invadido por una gran sonrisa y por copiosas lágrimas; ambas por una profunda alegría y gratitud por el don recibido de Dios.
Durante la homilía, el Obispo Lázaro explicó cada una de las tareas específicas del sacerdote según la tradición: enseñar, que se caracteriza por el anuncio de la verdad; santificar, que se realiza en Cristo de modo especial a través de los Sacramentos; gobernar, que invita a tener un corazón como el del Buen Pastor.
Asimismo, dijo al joven religioso: “Somos sacerdotes en cuanto participamos del sacerdocio de Cristo y obramos in persona Christi. Grábalo en tu mente y en tu corazón. Vas a ser ordenado sacerdote de Jesucristo, llamado a convertirte, al igual que Jesús, en enviado del Padre, para anunciar la salvación y santificar al Pueblo de Dios”.
Terminada la homilía, tuvieron lugar los momentos principales de la ordenación, entre ellos el revestimiento con la estola y la casulla por Mons. Leonardo Rodríguez Jimenes.
Después de la comunión, el P. Fernando Negro Marco, Sch.P., Provincial de EE.UU. y Puerto Rico, agradeció y felicitó al P. Jorge y a su familia, y dio lectura a la carta del P. Pedro Aguado, Padre General de los Escolapios, con motivo de la ordenación sacerdotal y en la que escribió: “Esto es lo que esperamos de ti y lo que yo te pido: que seas un hombre de fe, un hombre de oración, constructor de comunidad, apasionado por la educación evangelizadora, cercano a los jóvenes, ajeno a cualquier tentación de clericalismo o de mundanidad, entusiasmado con el compartir corresponsable de la misión escolapia, deseoso de estar entre los pobres, abierto a la misión de la Orden, comprometido en la renovación de la Provincia, deseoso de llamar a más jóvenes a nuestra vida y a nuestra misión”.
Por su parte, P. Jorge dijo: “Quiero que mi sacerdocio sea por Cristo, con Él y en Él”, expresó su gratitud y pidió a todos que continúen rezando por su ministerio y por sus hermanos en el sacerdocio, así como por cuantos serán ordenados en el futuro.
De otro lado, su primera Misa tuvo lugar en la comunidad parroquial que le vio crecer: la Parroquia Sagrada Familia de Bayamón, en la Solemnidad de la Santísima Trinidad. Ahora, la obediencia le conduce a servir en la Parroquia Santa Elena en el Bronx, Nueva York.
Vanessa Rolón Nieves
Para El Visitante
