Mensaje de Obispo Daniel durante la Marcha contra la imposición de la ideología de género

Mensaje de Mons. Daniel Fernández Torres, Obispo de la Diócesis de Arecibo, durante la Marcha contra la Imposición de la Ideología de Género en el currículo de las escuelas públicas de Puerto Rico el sábado, 14 de agosto de 2021 desde el Capitolio hasta la Fortaleza en el Viejo San Juan.

¿Quien vive? -todos contestan- CRISTO. ¿Quien vive? -todos contestan- CRISTO. Que bueno escuchar eso. Que bueno poderles saludar. Quisiera precisamente comenzar citando unas palabras de Cristo Nuestro Señor tomadas del Evangelio de San Mateo del Capítulo 18, versículos del 4 al 7:

“Dice el Señor: Así, pues, quien se haga pequeño ese es el mayor en el reino de los cielos. Y el que recibe a un niño como este en mi nombre, a mi me recibe. Pero el que escandalice a uno de estos pequeños, que creen en mí, pero al que escandalice a uno de estos pequeños -nuestros niños- que creen en mí, más le vale que le cuelguen al cuello una de esas piedras de molino que mueven los asnos y le hundan en lo profundo del mar. Hay del mundo por los escándalos, es forzosos ciertamente, que vengan escándalos. Pero hay de aquel hombre por quien el escándalo viene”.

Queridos padres, queridos abuelos, tíos, familiares y personas de buena voluntad que acuden hoy con una sola voz para defender la inocencia de los niños de Puerto Rico frente a las pretensiones de las tres ramas de gobierno de imponer la ideología de la perspectiva de genero. Porque no lo olvidemos, quizás de un modo más callado, pero también en la rama judicial se ha introducido esto y se le está imponiendo a los jueces de nuestro País que se juzgue desde la ideología de genero.

Hoy estamos aquí para recordarle al Gobernador, al Secretario de Educación, a los legisladores y a los jueces que los niños no son del estado, que los niños son de sus padres. Que son ellos los que tienen el derecho natural de criar a sus hijos según los principios y sus valores. Eso no es ni negociable ni opinable. Ya no solamente se pretende quitar a los padres su derecho de educar a sus hijos, sino se pretende nublar las conciencias de los niños sobre lo que son realmente como seres humanos sexuados llamados al amor. No permitamos que le roben la inocencia a nuestros niños con la imposición de la ideología de genero.

Sus hijos no son del estado. Y eso es importante que lo escuchen, tanto aquí detrás como en la Fortaleza. Que se oiga hoy bien fuerte, ¿no? Los hijos no son del estado. Vamos, que se oiga. -responden todos- LOS HIJOS NO SON DEL ESTADO. Otra vez: -responden todos- LOS HIJOS NO SON DEL ESTADO. Los hijos son de ustedes, padres y madres, a quienes les corresponde el derecho de educarlos.

La llamada perspectiva de genero, que no es otra cosa que la ideología de genero, aunque se empeñen en hacer una diferencia. Es lo mismo. No nos dejemos engañar. Ellos van a decir: no, ellos protestaron contra la ideología de genero, pero eso no es lo que nosotros decimos. Es lo mismo la ideología de genero que la perspectiva de genero. No podemos pecar de ingenuos ni nos vamos a dejar engañar. Es la llamada perspectiva de genero envenena la mente de nuestros niños. Ese modo de ver todo, desde la categoría del genero aunque se disfrace de supuestas buenas intenciones, parte de una premisa equivocada. No acepta la realidad tal cual es.

Por naturaleza, se nace: hombre o mujer. Y cuando el intelecto no se adecua a la realidad y pretende ser él quien crea la realidad estamos hablando de ideología. Decir que cada persona es lo que se auto percibe o como se imagina lo que es, sin una relación con su sexo biológico es pura ideología. Y nosotros, cristianos, nos damos cuenta de que en definitiva se trata del pecado de origen, ¿no?, querer ser como Dios.

Benedicto XVI decía que esta es la última rebelión de la criatura contra su creador. Ahora, todo es genero, perspectiva de genero, equidad de genero, violencia de genero. A través de esa palabra, a travez de ese lenguaje nos pretenden hacer creer que algo que no corresponde a la voluntad de Dios, que nos creó hombre o mujer. No queremos que hablen de genero o de géneros. Y tomado lo que decía Claribeth, no queremos que hablen de genero porque de genero es otra cosa. Dios no creo géneros, Dios creo sexo: masculino y femenino. El hombre y la mujer como seres complementarios.

Para enseñar la igualdad vasta hablar de la igualdad entre el hombre y la mujer. Que es conveniente, tal vez, enseñar roles que tradicionalmente han realizado las mujeres y que también los hombres pueden realizarlos, bien, o viceversa, ¿no? Pues, digámoslo de ese modo, se sencillamente de ese modo. ¿Que es necesario enseñar el respeto a toda persona? Por supuesto que sí, pero eso no significa enseñar que es bueno todo lo que las otras personas piensan o hacen cuando se trata de la sexualidad. Solo existe un único recto uso de la sexualidad humana, el dado por Dios. Otros usos son contra la naturaleza, son intrínsecamente desordenados y no pueden aceptarse como buenos en ningún momento.

Señor Gobernador, señores legisladores, señores jueces también. No se dejen engañar ni vendan su conciencias sometiéndose a los poderes de este mundo. Cualquier persona con rectitud de intención y honestidad intelectual que busque la verdad la encontrará. Hoy el pueblo cristiano les está anunciando y recordando la verdad. No tenemos los poderes del mundo que tanto seducen. No les ofrecemos ni dinero ni fama ni poder ni portadas amigables en la prensa. Pero si tenemos la fuerza de la verdad. Verdad de la que Cristo vino a dar testimonio en el mundo porque el es el camino, la verdad y la vida.

Queridos gobernantes, no se equivoquen, no se equivoquen. Cuando las autoridades religiosas y políticas de aquel tiempo dieron muerte a Jesús creyeron que habían vencidos, pero qué equivocados estaban. Por aquella muerte, Cristo venció a la misma muerte con su Resurrección. Tal vez ustedes, gobernantes de este País y otros sectores de esta sociedad, no nos hagan caso. Y tratarán de tergiversar lo que decimos y minimizar la fuerza de los cristianos. Pero en la lógica del obrar divino, cuando parece que se pierde se gana. No olviden, gobernantes de este País, lo que ocurrió en las primeras persecuciones a los cristianos y que muy bien se recoge en la expresión sangre de mártires semilla de cristianos, sangre de mártires semilla de cristianos. Mientras más nos aplasten o pretendan aplastarnos, mientras más nos ignoren, más fuertes seremos. Sangre de mártires semilla de cristianos. Digámoslo con fuerza para que nos recordemos: -todos responden- SANGRE DE MÁRTIRES SEMILLA DE CRISTIANOS. -todos responden- SANGRE DE MÁRTIRES SEMILLA DE CRISTIANOS.

Durante la farsa del juicio a Jesús Pilato se da cuenta de la inocencia de Jesús, pero por miedo, por querer quedar bien, por no perder su puesto político actúa en contra de lo que a todas luces era evidente y terminó soltando a Barrabas y condenando a muerte a Jesús. Señor Gobernador, señores legisladores, señores jueves, señor Secretario de Educación no comenta el mismo error de Pilato. Ante sus conciencias está la verdad de la recta sexualidad humana y está la gran mentira de la ideología de genero disfrazada de perspectiva de genero. Disfrazada de búsqueda de igualdad y de lucha contra la violencia. Escojan la verdad, sean valientes. El pueblo no puede esperar menos de sus gobernantes. El pueblo, especialmente nuestros niños, no merecen menos. Les aseguramos, gobernantes de este País, que por supuesto cuentan con nuestras oraciones para que Dios los ilumine y les de fortaleza para poder resistir las incidías del enemigo. Que Dios bendiga a nuestros niños, que Dios bendiga a Puerto Rico.