PARA ESCUCHAR:
“En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «He venido a prender fuego a la tierra, ¡y cuánto deseo que ya esté ardiendo! Con un bautismo tengo que ser bautizado, ¡y qué angustia sufro hasta que se cumpla!…”(Lc. 12, 49-53).
PARA MEDITAR:
«He venido a prender fuego». Liberando a los hombres del pecado y de la muerte, el Hijo de Dios ha podido, con su muerte y resurrección, sanar el corazón de los hombres, dándole la capacidad de amar a Dios y al prójimo con su mismo amor filial. Este fuego ardió en la vida de san Juan Pablo II, que nos invitaba a no tener miedo y a abrir las puertas al Señor.
PARA EXAMINAR:
¿Vives tu bautismo como el fuego del amor de Dios que arde en tu corazón? ¿El dolor, el sufrimiento y la incertidumbre han apagado el fervor de tu fe, esperanza y caridad? ¿Ardes en amor por el Dios que te ama con fidelidad? ¿Con ese fuego enciendes el corazón tu prójimo para que ardan en amor? ¿La vida de santidad del Papa Juan Pablo II te anima a abrir las puertas a Cristo sin temor como el mismo exhortaba?
PARA ORAR:
Oh, Dios, rico en misericordia,que has querido que san Juan Pablo, papa, guiara toda tu Iglesia, te pedimos que, instruidos por sus enseñanzas, nos concedas abrir confiadamente nuestros corazones a la gracia salvadora de Cristo,único redentor del hombre. Él, que vive y reina contigo. Amén.
Mons. Elías Morales
