El pasado sábado, 18 de marzo la feligresía de la comunidad parroquial de Caguax, Delgado, Caguas Norte y Jardines celebraron las Bodas de Oro de Padre Jesús M. Maiza Jauregui, con una Eucaristía presidida por nuestro nuevo Obispo Monseñor Eusebio Ramos Morales. También le acompañaron sus hermanos de comunidad P. Antonio Odriozola, párroco y P. Jaime Rodríguez, coadjutor y asistieron también para concelebrar P. Adrián Alicea, quien inició su vocación como sacramentino, P. Alberto Martínez, quien colabora en las vacaciones de los Padres, P. Roberto Medina criado en nuestra comunidad y P. Ignacio Iñaqui; estos últimos dos de la Comunidad Benedictina.
Al finalizar la misa de acción de gracias por la bendición de 50 años de servir al Señor con entrega, estando 28 años en la comunidad criolla de Caguas, pasamos a un merecido compartir social con la comunidad parroquial.
Nuestro Padre Jesús es del País vasco, el mayor de cuatro hermanos varones, de una familia de cálido amor que pasaba los veranos con sus abuelos. Es un hombre de Dios que le sirve con alegría y entrega. La congregación de sacerdotes del Santísimo Sacramento, a la que pertenece fue fundada por San Pedro Julián Eymard, Padre de la Eucaristía, y tiene sus principios en el fervor de Jesús Sacramentado; la adoración al Santísimo y la oración constante; como parte de sus rutinas diarias.
Padre Jesús llegó a Puerto Rico el 7 de octubre de 1986 a las 4:30 a. m, para hacer su misión pastoral en la comunidad sacramentina de Caguax, en Caguas. Desde ese momento hasta el 2004, estuvo sus primeros 18 años, luego salió por un período de 3 y regresó en el 2007 hasta el presente donde lleva 10 años siendo nuestro sacerdote.
Agradecemos al Padre Celestial por darnos la bendición de recibir a nuestro nuevo Obispo Monseñor Eusebio Ramos y por bendecirnos de manera extraordinaria al enviarnos a un fiel servidor del Señor, como lo es Padre Jesús. Le pedimos a Dios que lo continúe bendiciendo en salud para poder seguir contando con él. Gracias a Monseñor Eusebio, a los presbíteros que nos acompañaron y todos los feligreses que se dieron cita ese día para llenar de alegría y compartir con Padre Jesús.
Que el Señor los bendiga a todos.
(Maricarmen García)
