Aunque se está en el Siglo XXI y Puerto Rico es catalogado como un país de avanzada y primer orden, diariamente se discrimina a las personas por el color de su piel. Sí, así como lo lee, parecería algo del siglo pasado, pero es una realidad que atenta contra la dignidad del ser humano.
Así lo confirmó, el Lcdo. Ever Padilla-Ruiz, director ejecutivo de la Comisión de Derechos Civiles. “Se piensa que en P.R. no hay racismo, que no hay discrimen racial, pero la realidad es que no hablamos del tema y el hecho de que no lo hablemos no quiere decir que no exista”, precisó.
Continuó diciendo que: “Tenemos un racismo internalizado. La realidad es que todavía en el año 2018 nos enfrentamos al tema del discrimen por el color de la piel, condición social, el discrimen por nacimiento y el tema del racismo sigue siendo un asunto que está presente en nuestra sociedad”.
Detalló que esto ocurre a pesar de que la Constitución de Puerto Rico lo prohíbe. “En la Sección 1 dice que la dignidad del ser humano es inviolable y que todos y todas debemos ser iguales ante la Ley. Inclusive señala específicamente, que no se podrá establecer discrimen alguno por motivo de raza, color, nacimiento, origen, condición social, ideas políticas e ideas religiosas”, mencionó.
Al indagar a qué atribuye que muchas personas en Puerto Rico se ofendan si se les llama negros, aunque ese sea su color de piel, y prefieran que les digan trigueños, respondió que muchos dicen que no son negros. “Hemos relacionado el color con algo negativo. El mundo ha visto lo blanco como bueno y lo negro como malo. Todavía en nuestra realidad social y en nuestro imaginario vemos lo negro como negativo. Por eso hemos creado unas historias, ‘he tenido un día negro’, ‘que suerte negra la mía’, como si el color negro fuera algo negativo. Hay un doble discurso con esto porque cuando queremos estar elegantes nos vestimos de negro, si queremos vernos más flacos, nos vestimos de negro”, comunicó.
El licenciado Padilla-Ruiz destacó que las personas se quieren desligar de las situaciones negativas que se atribuyen a las personas de la raza negra y por eso no quieren identificarse como tal. Admitió que muchos se han quejado del documento que se utiliza para recoger los datos del registro demográfico donde se le pregunta a la persona de qué raza es, y la negra es una de las opciones. Reiteró que el color de la piel “es parte de nuestro ADN. Esa mezcla extraordinaria de las tres culturas: nuestra realidad africana, española y taína”.
De otro lado, señaló que encontrar una solución al problema del racismo no es tan sencillo. “Tenemos que mirar de dónde vienen las raíces de esta discusión. Vienen de una raíz histórica profunda cada uno conscientes o no, vivimos en este espacio que está marcado por la historia y la estructura que el estado ha dispuesto e inclusive cuando hablamos de racismo o gente negra, la imagen que viene a la mente es la esclavitud porque hemos asociado el tema racial a la esclavitud”, indicó el Director Ejecutivo de la Comisión de Derechos Civiles.
Al tiempo, lamentó que no se haya entendido y que no se hayan buscado estrategias para fomentar la igualdad y la inclusión de todas las personas para trabajar contra el racismo, combatirlo y darles las mismas oportunidades a todos independientemente de su color de su piel.
“Creo que el racismo internalizado no nos permite reconocernos tal cual somos. Tenemos que promover estrategias que permitan quitar las etiquetas porque en nuestro País todo lo etiquetamos. El color de piel es una etiqueta”, sentenció.
Sobre la cantidad de querellas que recibe la Comisión de Derechos Civiles en torno al racismo, aceptó que no son muchas “no porque no ocurran, sino porque las personas no las radican (querellas). Muchos se han acostumbrado a la idea y dicen ‘soy negro y qué’, pero también hay que cuestionar e impugnar el discrimen”.
Consecuentemente, declaró que “tenemos que empezar a mirarnos como personas y no por el color de nuestra piel. Para eso la educación es clave, hay que dejar los prejuicios de lado, solo hablando del problema y educándonos podremos trascender”.
