El próximo 4 de mayo se celebra el día litúrgico del beato Carlos Manuel Rodríguez Santiago. Usando esto como punto de partida el Círculo de Carlos Manuel Rodríguez (CMR), organismo que busca promocionar su vida y obra, intenta que todos los fieles del país conozcan sobre él.
Según Bienvenido García Villalón, miembro del Círculo CMR, tienen a la venta un libro sobre el Beato que tiene un costo de $25.00 y de un DVD que incluye momentos destacados de la beatificación en Roma por $15 o ambos por $30 esto con el fin de promocionar la causa abierta de su canonización. Aclaró que con la venta de los artículos no persiguen ningún beneficio económico. “Buscamos promover la causa del Beato que es de gran importancia para el mundo cristiano puertorriqueño. El 45 % de las ventas se destinará a Cáritas; un 30 % a Cáritas Diocesano y un 15 % a Cáritas Parroquial”, sentenció.
Sobre el libro titulado Beato Carlos Manuel Rodríguez Santiago, místico y apóstol laico puertorriqueño, destacó que es uno muy completo que fue escrito por Padre José María González Unzurrunzaga, quien, a pesar de que nunca lo conoció, presenta además de una biografía un estudio sobre la espiritualidad de Charlie desde su infancia hasta el momento de su muerte. “P. José María estuvo investigando aproximadamente por 5 años la vida del Beato e hizo muchas entrevistas antes de escribir el libro”, afirmó.
A su vez aprovechó para mencionar que los que lean el libro podrán conocer la perspectiva humana de Carlos Manuel que fue una persona que vivió y padeció los mismos problemas y circunstancias que cualquier otro puertorriqueño en su momento. “También encontrarán la espiritualidad del Beato que fue lo que le dio fuerza para actuar como ser humano y es lo que nos ha hecho que ciertas personas nos enamoremos de él, que tanto sirvió a la Iglesia y a la evangelización de Puerto Rico”, expresó.
De otro lado, el Dr. Gaspar Encarnación que conoció al Beato en el Centro Universitario Católico en la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras, dijo que no supo de la gravedad de la enfermedad de Charlie hasta que fue operado del estómago y fue a visitarlo al Hospital Universitario. “Él nunca habló de su condición, ni se quejó. En aquel momento lo que sabía de él era por las charlas que hacía sobre la liturgia. Él fue el pionero de las misas comunitarias”, mencionó.
Agregó que la primera vez que fue a visitarlo fue el Domingo de Laetare (IV domingo de Cuaresma). “Él sufría no por su enfermedad, sino porque el resto de los enfermos se quejaban de que no los atendían bien. Para él eso era muy angustioso, porque tenía una gran sensibilidad, se identificaba con el dolor ajeno. En ese sentido Charlie era extraordinario”, abundó.
Relató que cuando lo iban a dar de alta, entendió que no era bueno que Charlie se fuera para su casa, porque en aquel tiempo Caguas no quedaba tan cerca como ahora, así que le ofreció un cuarto que tenía en la parte de atrás de su oficina como médico generalista en Villa Palmeras. Permaneció ahí por un mes.
“El Sábado Santo de 1963, le traje un velón encendido del Cirio Pascual. Esa era una tradición que él seguía, dejar un velón encendido desde la Vigilia Pascual hasta la Fiesta de Pentecostés. Recuerdo que una vez que participamos en un día de vida cristiana (era un día que íbamos a un lugar, leíamos el Evangelio, nos explicaba los Salmos y nos enseñaba sobre liturgia) nos montamos un montón en el carro que yo tenía y fuimos hasta Caguas con el velón encendido”, rememoró entre risas.
Recalcó que el Beato tenía un gran conocimiento del tema de liturgia, algo que – admitió – no vio en ese momento pero de lo que ahora está consciente. “Charlie nos preparó un manual, como un misal; en un lado estaba el texto en latín y en el otro en español, para que pudiéramos comprender lo que estábamos diciendo en la misa que en aquel momento era en latín”, precisó. Reconoció que aun con sus conocimientos en liturgia siempre fue obediente a la Iglesia y a los sacerdotes.
Finalmente, los interesados en obtener el libro en promoción o el primero que se publicó: Un santo puertorriqueño. Pueden comunicarse al (787) 728-7410. También invitan a que cualquier persona que haya recibido un favor por intercesión del Beato llame o escriba a la siguiente dirección: Círculo CMR, P.O. Box 360748, San Juan P.R., 00936-0748.