Peñuelas- La Comisión Diocesana de Pastoral Juvenil ofreció el fin de semana del 31 de julio al 2 de agosto, el Campamento de Animadores en la Casa de los Hermanos Cheos. Los jóvenes, procedentes de 15 parroquias, disfrutaron de talleres que los capacitaron en las áreas de planificación de actividades y reuniones, preparación de temas, la figura del animador y sus funciones, el uso de la música, entre otros. La alegría era desbordante: “Describiría ésta experiencia como una muy enriquecedora social y espiritualmente hablando. Considero que lo más significativo es el encuentro personal con Cristo, que provoca este tipo de actividad. Además de esto, fue muy importante que se nos haya brindado la oportunidad de conocer y compartir con otros jóvenes de la diócesis”, expresó Zulian González Antommarchi, animadora de la Parroquia Santo Domingo de Guzmán en Yauco.
En varias ocasiones los participantes tuvieron la oportunidad de contar sus experiencias y desarrollar trabajos en pequeñas comunidades. Por otro lado, hubo dos reuniones por arciprestazgo (zonas en las que se divide la diócesis) donde se discutió sobre la realidad del joven hoy en día. En estas, se evaluaron los problemas y las posibles soluciones en los temas de ecología, familia, pobreza, sociedad, sexualidad, tecnología y educación que están impactando a esta generación. Yarahika Ortiz, coordinadora diocesana, también enfatizó que “los momentos de oración fueron bien importantes en el campamento. Creo que los jóvenes no se esperaban que en medio de los talleres hubiese el rezo del rosario, adoración al Santísimo, entronización de la palabra y confesiones. Una de las cosas más especiales fue el integrar las actividades diarias del fin de semana con los momentos de oración”.
La joven Paola Rivera, de la Parroquia Ntra. Sra. de la Monserrate de Jayuya, comentó que esta experiencia le brindó la oportunidad de compartir con jóvenes interesados en conocer más a Dios y en anunciar la Buena Nueva. Incluso puntualizó: “Esperamos ser jóvenes apóstoles para atraer y motivar a más jóvenes a la Pastoral Juvenil; además de fortalecer su fe y su crecimiento espiritual”. El Campamento de Animadores finalizó con la Misa de Clausura y entrega de diplomas del primer ciclo de la Escuela de Formación Effetá. La misma fue presidida por los vicarios de pastoral juvenil, P. Arnaldo Ortiz Dominicci y P. Juan Carlos Rivera Medina.
Formación, comunión y apoyo
Durante este campamento, los jóvenes fueron invitados a la Escuela de Formación Effetá. Tommy Ruiz, de la Comunidad Juvenil “Evangelizo” de la Parroquia La Resurrección en Ponce, hizo hincapié en la importancia de la formación: “lo mejor que podemos aspirar es que los jóvenes del mañana estén bien preparados y educados en la Fe. Mientras más preparados estemos, vamos a poder defender lo que creemos y no vamos a dejarnos engañar por el mundo”. Además, varios jóvenes reconocieron la importancia de la comunión entre todas las comunidades juveniles de la diócesis: “considero vitalmente importante que los grupos de las parroquias estén unidos a la Pastoral Juvenil diocesana. Esto nos permitirá aprender unos de otros y establecer una comunicación con aquellos que puedan guiarnos en nuestro caminar”, manifestó Zulian. Mientras, el joven Tommy añadió: “esta unión crea ese vínculo necesario para que los recursos de la Iglesia lleguen y puedan transmitirse de forma directa a los jóvenes. Llevo poco tiempo de animador en la parroquia y gracias a esto puedo hacer mucho más por mi comunidad juvenil”.
Por último, estos animadores le enviaron un mensaje esperanzador a los adultos en la Iglesia y solicitaron su apoyo: “gracias a este tipo de campamento y retiros dirigidos a jóvenes, podemos decirles a los adultos que el futuro de la Iglesia Católica está en excelentes manos. Con la ayuda siempre de Dios y de nuestros sacerdotes”; “a los adultos de la iglesia, les diría que perseveren en su fe para que nos arrastren con su buen ejemplo. Nuestra iglesia tiene una juventud muy activa y comprometida, solo debemos saber alimentar bien esa semilla para que florezca en una firme fe católica”, palabras de Tommy y Zulian, respectivamente.
Edna K. Rodríguez Nazario
Comisión Diocesana de Pastoral Juvenil
