(“Participa en formar una nueva sociedad en Puerto Rico en la década del 2017 al 2027”)
Escucha adulto, esto es para ti
Este artículo está dirigido a adultos que tienen la oportunidad de participar en la formación de niños, adolescentes y jóvenes; o sea, padres, abuelos, tíos, hermanos y primos mayores, maestros, catequistas, padrinos y madrinas… Tú que lees este artículo. El reto que se presenta es interesante.
Todo el mundo se queja de que vivimos en una sociedad violenta, aumento en suicidios de jóvenes y adultos mayores, alza en enfermedades mentales, depresión, baja autoestima, sociedad que no vive, se debate en sobrevivir por encima de la mentira, la falta de transparencia y la corrupción. También se observa un consumismo excesivo, y el interés exagerado por el poder y el dinero, o todo lo contrario, interés en que me den, pensando que no soy capaz de elevarme por mí mismo, porque no sé lo que soy.
Proceso necesario que debes seguir fielmente
El Espíritu Santo te está tocando en tu corazón. ¡Ábrelo para que te llenes de los dones y carismas que tiene para ti! ¡Créelo! Dios no miente y es su Promesa. Ten Fe, que no necesitas mucha ciencia para empezar. Hay más cosas buenas, que malas, pero no las vemos cuando nos quedamos anclados en las malas noticias, en el desamor y en las heridas del pasado, el odio y el rencor.
1. Cuando Dios engendró a cada hijo/a en el vientre de la madre, puso Su ADN de Amor, y el alma. Por eso podemos comunicarnos con Dios. Somos capaces de escucharle en la oración para clarificar la realidad y desde nuestra conciencia tomar decisiones honestas para todo el mundo. Nuestra esencia es el amor porque Dios nos hizo a su imagen y semejanza. El hombre creado por Él es una comunidad de dos personas humanas, varón y mujer, unidos en entrega mutua, y abiertos a la vida para traer al mundo los hijos de Dios; y con el compromiso de educarlos según el orden divino. Nuestra misión en la vida es amar, perdonar y servir al prójimo. Así se sanan las heridas y todo cambia, dentro de nosotros y fuera también.
El primer paso es profundizar en toda esta verdad. Lee la Biblia, ora, conoce las enseñanzas de la Iglesia pueblo de Dios, vivo desde hace más de 2 mil años, conducido por el Espíritu Santo, dador de dones y carismas, al que los quiere recibir. Dile sí a Dios.
2. Vivir en una comunidad de amor es el modo de vida de los hijos de Dios, al modo de Dios, que es comunidad de tres divinas personas, Padre, Hijo y Espíritu Santo, viviendo y amando sin límites. La familia humana es la primera comunidad en que viven los niños, los adolescentes y los jóvenes, la futura sociedad adulta. Rescatemos los valores y promovamos que trasciendan a la próxima década, y tendremos un Puerto Rico mejor. ¡Acepta el reto! No estamos solos.
(Luz Palmira Burgos)
